La edición se agotó en apenas un mes, quizá gracias a que media Europa había amanecido aquellos días con pintadas como «Marx, Mao y Marcuse». Supongamos que hemos realizado la producción como seres humanos. Y, al contrario, en la parte de la derecha se ve que los elementos muy pesados tienen menor energía de ligadura que los que son algo más ligeros.